¡¡¡Por
fin vacaciones!!! Han sido unos meses complicados pero todo está
aprobado. Así que esta es una de las primeras entradas post exámenes
finales y la voy a dedicar al juego al que más caña le estoy dando
últimamente gracias a la consola virtual de Wii U. Además cambiamos de estilo de letra y formato aprovechando el inicio del Verano.
Después
del grandioso éxito de “Super Mario World”, séptima entrega de
la saga de Mario y la primera en Super NES, los chicos de Nintendo
querían volver a llevar a su personaje a los altares del éxito.
Pero tras muchos años repitiendo una y otra vez la misma formula
pensaron en cómo darle una nueva vuelta de tuerca a la jugabilidad
de la serie. De esta forma Miyamoto se sacó de la manga una historia
que funciona de precuela no solo de su capítulo anterior sino de
todos los juegos protagonizados por nuestro querido fontanero. Sin
embargo, cuando éste presentó su trabajo a los directivos de
Nintendo lo tildaron de “infantil y demasiado colorido”: ellos
pretendían continuar con el aspecto moderno conseguido por Rare y
sus “Donkey Kong Country” con sus gráficos prerenderizados. La
respuesta enfureció a Miyamoto y la leyenda cuenta que enfatizó en
el juego final los colores vivos y alegres junto al aspecto infantil
que rodea al cartucho.
Aunque
el protagonista sea Mario hay que decir que no es el mismo de la saga
original. Aquí tan solo es un bebé que busca incansablemente a su
hermano Luigi y que junto a Yoshi quiere rescatarlo de las garras de
Kamek y de algún que otro conocido... Y es que por fín el
dinosaurio verde (que llevaba años en la cabeza de Miyamoto pero que
por temas de limitación técnica no había podido introducir en la
saga hasta “Super Mario World”) es el gran protagonista del
juego, comenzando con su propia serie de juegos que llega hasta
nuestros días.
La
propuesta jugable de Yoshi se diferencia de Mario en varias cosas.
Seguimos saltando y aplastando enemigos pero se añade la posiblidad
de engullir a los adversarios y convertirlos en huevos para
posteriormente lanzarlos. Además podemos revolotear un poco en el
aire manteniendo el botón después de ejecutar un salto, práctica
necesaria para los casos en los que uno calcula mal y no alcanza
determinada plataforma. Por lo demás son 6 mundos a resolver con
ocho fases en cada uno de ellos y sus correspondientes sub-jefes y
jefes finales.
El
juego original (publicado en 1995) vivió una conversión portátil
para Game Boy Advance con el título “Super Mario Advance 3 –
Yoshi’s Island” con level mejoras pero con menor nitidez en la
pantalla, algo por otro lado lógico. Para Nintendo DS apareció
“Yoshi’s Island” (titulado en un principio “Yoshi’s Island
2") y considerado secuela de “Super Mario World 2” y en el que
se vuelve a contar la misma historia pero añadiendo nuevos bebés
(baby Peach, baby Bowser, baby Donkey Kong, etc...) con diferentes
habilidades y muy necesarias para avanzar en el juego.
Por cierto, paciencia con el speedrun del video... dura un poco más de seis horas XD
Por cierto, paciencia con el speedrun del video... dura un poco más de seis horas XD