27 de octubre de 2013

Mi querido ladrillo portátil

Esta mañana ha tocado limpieza de mi habitación. Reconozco que uno es muy desordenado dentro de su propio orden, y cuando mi madre me da el toque de atención me pongo rápidamente a ponerlo todo “en su sitio”. Así que al abrir los cajones de mi escritorios has aparecido... un vendaval de recuerdos ha venido a mi mente.

Llegaste a mi vida el día de mi comunión, hace ya mucho tiempo. Y aunque al principio te tuve que compartir con parte de la familia (mi prima no te soltó en todo el banquete) nos hicimos muy buenos amigos y me mostraste un mundo lleno de diversión y jugabilidad. Nos acompañaron Mario, Megaman, Robocop, Kirby, Wario, las fichas del Tetris o los luchadores del Mortal Kombat. Además de vez en cuando llegaba a tus circuitos algún cartucho pirata y, aunque ya se que quizás no te caían bien del todo, al final entendías mis ansias de jugar.

Lo malo fue que el tiempo no pasaba en vano y empezaste a hacerte mayor. Necesitabas pequeños retoques (pegar el protector de la pantalla por ejemplo) y tus competidores empezaban a hacerse fuertes. Pero continuabas ahí, por si alguna vez me apetecía echar la vista atrás y volver a sentir tu fuerza portátil. Y cuando llegó tu hermana Pocket te portaste fenomenal y no tuviste dudas a la hora de acogerla. Otra cosa fue el torbellino que resultó Nintendo DS porque la novedad hizo que te apartara de mi lado...

Descansas cerca de mi y te tengo muy buen cuidada, y eso hace que cada vez que te vea me acuerde de los buenos momentos. De hecho, y aunque pueda jugar a todo tu catálogo a través de la última de tus hermanas, prefiero tu tacto y tu pantalla verdosa para volver a ser un niño.

Gracias por todo, Game boy.

20 de octubre de 2013

Whoopee!! / Pipis & Bibis (Arcade)

Hay un tipo de juegos que nunca se ha comentado en este blog : me refiero a los denominados juegos eróticos. Aunque en realidad me niego a catalogarlos como un género propio porque a la hora de la verdad se trata de clones de otros títulos a los que se le ha añadido un alto componente erótico. O sea, que la fórmula “arcade de éxito” mas “sexo” siempre vende.

En este caso nos encontramos frente a una versión del mítico “Elevator Action” de la empresa Taito. Tomamos el rol de los protagonistas Pipis y Bibis y debemos poner bombas en los ordenadores de cada pantalla para salir pitando. Cada una de ellas se compone de varias plataformas, ascensores y escaleras, donde también estarán nuestros enemigos. A éstos los podremos vencer gracias al laser del que disponemos : un solo toque los dejará aturdidos pero si insistimos los mandamos directamente al piso inferior al que estamos. Una vez colocada la última bomba estallan todas y debemos dirigirnos rápidamente a la salida (disponemos de unos pocos segundos) antes de que todo se derrumbe.

¿Y dónde está lo erótico? El juego consta de 20 pantallas divididas en 5 fases. Al inicio de cada fase se nos muestra la imagen animada de una jovenzuela. Cada pantalla que completemos nos regalará una parte de la chica pero sin ropa y al superar la quinta el juego nos obsequia con el cuerpo desnudo al completo. Eso sí, las partes pudendas de las muchachas aparecen difuminadas.

Aparte del tema erótico (que cuando eres un niño o chaval emociona pero con el tiempo ya no) el arcade es todo un juegazo. Aunque reconozco que a veces me saca de quicio, ya que hay que tener una cierta lógica a la hora de colocar las bombas. Además, a medida que se avanza en el juego las pantallas se hacen más y más difíciles (¡¡malditas camas elásticas!!).